10 feb 2011

Se adapta al cambio climático

"Lo que intentamos es crear distintas variedades de arroz que ofrezcan un buen rendimiento a los agricultores con un menor uso de fertilizantes y que además sean resistentes a las condiciones ambientales desfavorables, como las inundaciones, la sequía, las bacterias, las malas hierbas o la alta salinidad del agua", explica a Efe Jauhar Ali, científico.
En base a los datos de que al cultivo del arroz se destina cerca del 30 por ciento del agua que se emplea en todo el mundo con fines agrícolas y en Asia llega al 80 por ciento, los científicos persiguen crear una semilla que precise menor riego.
Por el momento, han obtenido varias semillas que han tenido buen resultado en terreno seco, en áreas inundadas y con alta salinidad y han perdurado ante la invasión de malas hierbas en experimentos realizados en 15 países de Asia y de África.